En el 71º aniversario del lanzamiento de la gran revolución cubana, el asalto al Cuartel Moncada el 26 de julio de 1953, la Red de Solidaridad con los Presos Palestinos Samidoun saluda al pueblo cubano, a su continua revolución y a la alianza permanente entre los pueblos de Cuba y de Palestina para hacer frente al sionismo, al imperialismo y a la reacción.
En 1953, los revolucionarios cubanos lanzaron su ataque contra el Cuartel Moncada, un año después de que el general militar cubano Fulgencio Batista, entregado a los intereses del imperialismo estadounidense, tomara el poder en la isla, prohibiendo los sindicatos y los grupos socialistas, cortando los lazos con la Unión Soviética y fomentando lazos aún más estrechos con Estados Unidos. Los revolucionarios cubanos, incluidos Fidel Castro y Raúl Castro, lanzaron su ataque ese día y, aunque no pudieron derrotar al régimen cubano apoyado por Estados Unidos ese día, crearon el Movimiento 26 de Julio, que crecería hasta englobar a Ernesto Che Guevara, Camilo Cienfuegos y muchos más revolucionarios que lograrían la victoria en 1959.
Antes de la operación 26 de Julio, Fidel Castro dijo: “Dentro de pocas horas ustedes serán victoriosos o derrotados, pero independientemente del resultado -escuchen bien, amigos- este Movimiento triunfará. Si vencéis mañana, las aspiraciones de Martí se cumplirán antes. Si fracasamos, nuestra acción será, sin embargo, un ejemplo para el pueblo cubano, y de él surgirán nuevos hombres dispuestos a morir por Cuba. El pueblo nos apoyará en Oriente y en toda la isla. Como en el 68 y en el 92, aquí en Oriente daremos el primer grito de ¡Libertad o Muerte!”.
El propio Fidel Castro fue prisionero político durante dos años antes de unirse a sus compañeros revolucionarios en la Sierra Maestra, para construir el movimiento revolucionario que expulsaría al imperialismo estadounidense de Cuba y marcaría el comienzo de una nueva era para América Latina, en primera línea de la confrontación del imperialismo en la región y en todo el mundo. De hecho, su discurso “La historia me absolverá”, pronunciado ante el tribunal que lo condenó, se convirtió en el manifiesto del Movimiento 26 de Julio. La revolución cubana abrazó el internacionalismo revolucionario, apoyando a movimientos de todo el mundo, luchando por la liberación en África, Asia y América Latina, y estableciendo lazos con movimientos de lucha en el corazón del núcleo imperial. La causa revolucionaria cubana se unió al movimiento de Liberación Negra en Estados Unidos, una alianza que se mantiene hasta nuestros días.
La Habana, Cuba, lanzó la Conferencia Tricontinental en 1966, que condujo al desarrollo de la OSPAAAL (Organización de Solidaridad con los Pueblos de Asia, África y América Latina), cuyos carteles a favor de la revolución palestina -y de otras luchas antiimperialistas- han permanecido como símbolos indelebles de la causa común de la justicia.
A través de esta lucha revolucionaria nació la profunda alianza entre las revoluciones cubana y palestina. Cuba ha apoyado sistemáticamente la lucha de liberación palestina a múltiples niveles, y las banderas palestina y cubana se han alzado como estandartes gemelos de la liberación en todas partes del mundo, reflejando la confrontación común del imperialismo, el sionismo y sus agentes reaccionarios en todas partes. En Palestina, la revolución cubana siempre ha tenido una resonancia particular. El Che Guevara visitó Gaza en 1959, poco después de la victoria de la revolución, como parte del Movimiento de Países No Alineados y de la alianza de fuerzas anticoloniales. Según el académico palestino Salman Abu Sitta, Guevara instó a los palestinos a desarrollar sus campos de entrenamiento, producción de armas y centros de movilización popular. Hoy, en 2024, viendo la fuerza de la resistencia, su capacidad de producción de armas en medio del asedio y el genocidio, y el firme apoyo popular del pueblo, está claro que el movimiento revolucionario palestino ha aplicado plenamente esas propuestas más allá de lo que se podía imaginar en 1959.
El líder de la lucha armada en Gaza a principios de la década de 1970 fue Mohammed al-Aswad, del Frente Popular para la Liberación de Palestina – “Guevara Gaza”. De hecho, Moshe Dayan dijo una vez: “Nosotros controlamos Gaza de día, y Guevara y sus camaradas la controlan de noche”. El Che Guevara sigue siendo un símbolo unificador no sólo de la izquierda palestina, sino de la lucha armada de liberación más allá de las líneas políticas. Hoy, mientras Yahya Sinwar, Mohammed Deif y todos los heroicos combatientes de las Brigadas Al-Qassam, Saraya al-Quds, las Brigadas Abu Ali Mustafa y todas las fuerzas armadas de la resistencia palestina dirigen una batalla sin precedentes desde Gaza, el famoso llamamiento del Che, “¡Patria o muerte!” resuena en su valentía, fe y amor por el pueblo y la tierra de Palestina.
Hoy, mientras la Resistencia Palestina dirige la lucha de liberación en Gaza, alineada con todas las fuerzas de la resistencia en la región y en el mundo, son los combatientes en Palestina, en Yemen, en el Líbano, en Iraq, los que están marcando el comienzo de otra nueva era de la derrota del imperialismo. El diluvio de Al-Aqsa ha marcado el punto de inflexión para una nueva generación de revolucionarios, hacia una intifada global y un renacimiento del movimiento revolucionario palestino e internacional, un gran diluvio que arrasará la hegemonía imperialista estadounidense y europea en la región árabe e iraní. Este aniversario es tanto más significativo cuanto que el pueblo palestino de Gaza resiste al genocidio y encabeza la batalla por la liberación de Palestina desde el río hasta el mar y la derrota total del sionismo y el imperialismo.
Poco después del aniversario de la fundación del Frente Sandinista de Liberación Nacional en Nicaragua, el 19 de julio de 1961, y de la victoriosa revolución nicaragüense 18 años después, en 1979, mientras Nicaragua sigue enfrentándose al imperialismo estadounidense, y este año, en 2024, conmemoramos el aniversario de la Revolución Cubana mientras la Venezuela bolivariana se prepara para las elecciones presidenciales del 28 de julio, haciendo frente a las sanciones patrocinadas por Estados Unidos, las medidas económicas coercitivas y la intervención imperialista destinadas a socavar e imponer un cambio de régimen a la Revolución Bolivariana. Venezuela se aferra a su soberanía y a sus compromisos internacionalistas, incluido el de la liberación palestina, para determinar su propio futuro como parte del campo global de resistencia.
Cuba es quizás uno de los ejemplos paradigmáticos de desafío y firmeza frente a las sanciones estadounidenses, junto con Haití, Irán y otras naciones que han estado sometidas a la coerción económica y militar imperialista durante décadas. Estados Unidos ha intentado imponer un cambio de régimen en Cuba y destruir la revolución cubana mediante sanciones, bloqueos y políticas destinadas a matar de hambre y empobrecer al pueblo cubano. El bloqueo de Gaza y el asedio a Palestina -y al pueblo palestino en todas partes- es similar al impuesto a Cuba, y ambos representan una forma de genocidio, una guerra contra la población en su conjunto y un intento de confiscar la riqueza de los pueblos del Sur Global mediante el fraude y el robo, como bien ha documentado el Tribunal Internacional de los Pueblos sobre el Imperialismo Estadounidense.
Cuba también está actualmente etiquetada como “estado patrocinador del terrorismo” por los Estados Unidos, siendo designada en un claro intento de imponer presión política, económica y militar sobre Cuba para que abandone su vía soberana y socialista de desarrollo. Esto recuerda al caso de Palestina, donde las organizaciones de resistencia palestinas, incluyendo Hamás, el Movimiento de Resistencia Islámica; el Movimiento de la Yihad Islámica Palestina; el Frente Popular para la Liberación de Palestina; Hezbolá, y muchas otras fuerzas de resistencia, son etiquetadas como “organizaciones terroristas” por Estados Unidos, Gran Bretaña, la Unión Europea y Canadá en un intento de socavar la lucha justificada y legítima del pueblo palestino por todos los medios, incluyendo y especialmente la lucha armada, para lograr su liberación. Las designaciones “terroristas” pretenden dividir a los pueblos del mundo para que no forjen alianzas, criminalizar la solidaridad mundial y separar a las poblaciones en el exilio y la diáspora de sus patrias. Tanto en Cuba como en Palestina, Líbano, Yemen y Filipinas, tales designaciones nunca lograrán socavar la lucha de los pueblos por la justicia, la dignidad y la verdadera libertad.
El 26 de julio de 2024, en este monumental aniversario, la Red de Solidaridad con los Prisioneros Palestinos Samidoun extiende su saludo y solidaridad al pueblo y liderazgo de Cuba y enfatiza nuestra confianza en el continuo éxito, desarrollo y fortaleza de la revolución cubana. También saludamos y nos unimos al movimiento mundial para poner fin al bloqueo, el asedio y las sanciones a Cuba.
Confiamos en que la larga alianza y la profunda solidaridad de los movimientos y pueblos revolucionarios palestino y cubano continuarán floreciendo y desarrollándose, y que todos los planes y ataques imperialistas contra Cuba fracasarán, rompiendo el asedio y el bloqueo y eliminando a Cuba de la “lista del terror”.
Además, vemos este aniversario como una promesa para el futuro de Palestina también, de la victoria inevitable de la lucha del pueblo por la liberación, y el triunfo de la resistencia palestina sobre el sionismo, el imperialismo y todos los agentes reaccionarios. La victoria está llegando, desde los túneles de Gaza, a los campos de resistencia en Cisjordania, al pueblo palestino que lucha por el retorno en el exilio y la diáspora, a la valiente lucha en la Palestina ocupada del 48, dirigida por la heroica resistencia. Como dijo Fidel Castro en 1953, la historia nos absolverá de todas las mentiras y campañas de propaganda del sionismo y el imperialismo, y defenderá a los heroicos luchadores de Palestina como defensores de la humanidad, anunciando una nueva era para todos.
¡Victoria para Cuba, victoria para Palestina!
¡Abajo el imperialismo!
Del río al mar, ¡Palestina será libre!
Algunos de los carteles cubanos por Palestina producidos por OSPAAAL: