La Red de Solidaridad con lxs Presxs Palestinxs Samidoun se une a todo el movimiento nacional palestino para condenar el asesinato, lamentar el martirio y honrar la vida del dirigente Ismail Haniyeh, Abu al-Abed, presidente del Buró Político de Hamás, el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina, en Teherán, Irán.
Haniyeh se encontraba en Irán para asistir a la toma de posesión del recién elegido presidente iraní, Masoud Pezeshkian, y también se reunió con el imán Jamenei, junto a Ziyad Nakhaleh, del Movimiento de la Yihad Islámica Palestina. Haniyeh fue asesinado junto a su guardaespaldas y compañero, el mártir Wassim Abu Shaaban, en la residencia donde se alojaba por una “traicionera incursión sionista”, según declaró Hamás en el primer comunicado del movimiento sobre el asesinato.
La política de asesinatos selectivos del régimen sionista lleva más de 76 años intentando borrar el liderazgo del pueblo palestino. Los nombres de los mártires del asesinato son grandes y brillantes figuras de la historia. Ismail Haniyeh, Saleh al-Arouri, Abu Ali Mustafa. Fathi Shiqaqi. Ghassan Kanafani, Kamal Nasser, Abdel-Aziz Rantisi, Jeque Ahmed Yassin, Abu Jihad, Mohammed al-Najjar, Basil al-Kubaisi, Tareq Izzedine, Samir Kuntar, Kamal Udwan, Imad Mughniyyeh, Jeque Khader Adnan y Ibrahim al-Rai: un desfile de mártires en el camino hacia la liberación de Palestina.
Ismail Haniyeh fue asesinado como parte de una política global del régimen sionista que pretende eliminar a los líderes, portavoces y voces revolucionarias del movimiento de liberación palestino.
Esta agresión fue también un acto de guerra contra Irán, y se produjo el mismo día en que se intentó asesinar a un dirigente de Hezbolá, el movimiento de resistencia libanés, mediante el bombardeo sionista de los suburbios del sur de Beirut, y el mismo día en que Estados Unidos bombardeó Iraq, apuntando a la resistencia iraquí, asesinando a tres miembros de las fuerzas de resistencia. También está claro que no se trata sólo de un crimen sionista, sino de un crimen planeado y pagado por Estados Unidos y sus socios imperialistas.
Estos asesinatos no han minado la fuerza, la solidaridad, el compromiso o la firmeza de la alianza de las fuerzas de resistencia en la región. De Irán a Líbano, de Yemen a Iraq a Siria y, por supuesto, a Palestina, donde el pueblo y la Resistencia se enfrentan diariamente al régimen genocida sionista, el pueblo tiene el derecho y la determinación de resistir, responder y enfrentarse a los asesinos y genocidas. Además, este crimen no demuestra la “fuerza” de la entidad sionista sino su desesperación y decadencia. Estos asesinatos y agresiones internacionales se producen cuando el régimen sionista está desgarrado por las contradicciones internas y las revueltas de colonos y soldados que exigen el derecho a violar a los palestinos encarcelados, lo que refleja los estertores de un monstruo colonial herido.
Ismail Haniyeh, con 61 años, era esposo, padre y abuelo, nació como refugiado palestino en el campo de al-Shati y luchó toda su vida por la liberación del pueblo palestino. Desde sus tiempos de estudiante, cuando era jugador de fútbol y dirigente del Bloque Islámico en la Universidad Islámica de Gaza, se dedicó al movimiento Hamás y a Palestina. En 1989, en medio de la gran Intifada popular y poco después de la fundación del movimiento, Haniyeh fue secuestrado y encarcelado por el régimen sionista durante tres años, antes de que formara parte de los 415 dirigentes y miembros de Hamás y la Yihad Islámica deportados por la fuerza a Marj al-Zuhour, en el sur del Líbano, el 17 de diciembre de 1992, junto con el Dr. Abdelaziz al-Rantisi, el jeque Youssef Sarkji, el jeque Saleh al-Arouri, el doctor Mahmoud al-Zahhar y, entre muchos otros, Mustafa Abu Ora, mártir del movimiento de presos hace apenas cinco días.
Dirigió la oficina del jeque Ahmed Yassin en Gaza y fue elegido líder de Hamás en Gaza en 2004, tras el asesinato de Abdel-Aziz al-Rantisi. En 2017 Haniyeh fue elegido por el movimiento Hamás para dirigir su Buró Político y fue reelegido para este cargo en 2021.
Haniyeh era el principal negociador mandado por el movimiento Hamás y de todas las organizaciones de la Resistencia palestina, y este asesinato tiene como objetivo impedirle ver y recibir directamente a los presos liberados por la Resistencia y subraya una vez más que al régimen sionista solo le interesa continuar con el genocidio.
Más de 60 personas de su familia han sido martirizadas, asesinadas por el régimen sionista en los últimos 10 meses, entre ellas tres de sus hijos y cinco de sus nietos. “La sangre de mis hijos no es más valiosa que la sangre del pueblo de Palestina, y todos los mártires de Gaza son mis hijos”, dijo, valorando a todas y todos los mártires de Palestina.
“No hay diferencia entre los mártires, y todos han sido elegidos por el más misericordioso para allanar nuestro camino hacia la victoria y la libertad”, dijo. “La sangre de los mártires exige que no cedamos, que no retrocedamos, que no cambiemos ni nos alteremos, que no aflojemos ni desesperemos, sino que continuemos nuestro camino con determinación”.
El mártir Tareq Izzedine, del movimiento de la Yihad Islámica, hizo su última declaración antes de su asesinato sobre el martirio del jeque Khader Adnan, asesinado él mismo por negarse a recibir atención médica en las cárceles sionistas. Sus palabras siguen resonando hoy (vídeo de Resistance News Network): “Siempre que ascienda un líder, surgirán diez para sustituirlo. Cuando ascienda un mártir, surgirán 100 mártires para sustituirlo”. La marcha continúa y no se detiene hasta la derrota de la ocupación”.
El mismo día , Ismail Haniyeh había dicho, en su reunión con el Imam Jamenei: “Ayer se cumplieron 300 días de la guerra de Gaza, y hemos llegado a una etapa crítica e histórica en la que el pueblo palestino y las Fuerzas de Resistencia deben mantener su heroísmo y su victoria.”
Su última gran declaración fue a favor de los presos y de la movilización popular, instando a la gente de todo el mundo a participar en el llamamiento a la acción del 3 de agosto por Gaza y los presos. “La libertad está cerca para nuestros dignos prisioneros y honorables prisioneras, y la victoria se acerca para nuestro pueblo y nuestra valiente resistencia”.
“Hacemos un llamamiento a la participación activa y masiva en este día nacional y mundial en defensa de nuestros presos prisioneras y de nuestro pueblo en la Franja de Gaza, para denunciar los brutales crímenes de la ocupación contra ellos, y para apoyar sus derechos y su justa causa…. Esperamos hacer del 3 de agosto un día crucial en todas las partes de Palestina, en los campos de refugiados y en la diáspora, en nuestro mundo árabe e islámico, y entre todas las personas libres del mundo, para apoyar a nuestro pueblo en Gaza y a nuestros presos y presas en las cárceles de la ocupación.”
Todxs debemos movilizarnos, el 3 de agosto y después. Todos debemos actuar. Todos debemos continuar la lucha, para enfrentarnos al sionismo y al imperialismo en todas partes y hacerles rendir cuentas por sus crímenes.
De Beirut a Teherán, de Gaza a Haifa, a todas nuestras comunidades, este es el momento de la acción y la confrontación. Nunca han matado a la resistencia y no lo conseguirán hoy.
Ismail Haniyeh y todos los mártires siguen vivos, y su legado de compromiso, sacrificio y amor por el pueblo es una inspiración para las generaciones futuras. La derrota del sionismo está cerca, al igual que la liberación de Palestina desde el río hasta el mar. Cada uno de los honorables mártires ha sacrificado todo para hacer que esta visión sea la realidad material, cada día más cercana.
Gloria al mártir Ismail Haniyeh y a todas y todos los mártires de Palestina y de la Resistencia. Retorno, liberación y victoria a Palestina, a toda Palestina, del río al mar.