Quinto día de la brigada Ghassan Kanafani en Líbano

En el quinto día de la brigada Ghassan Kanafani en Líbano, nos hemos reunido con camaradas del Partido Democrático Popular, entre ellos el secretario general Mohamad Hashisho y la coordinadora Rita Hamdan.

El Partido Democrático Popular es un partido político libanés cuya línea principal es el marxismo-leninismo y la causa principal en torno a la que gira el programa del partido es la casusa palestina. Partiendo de esta base, reconocen la importancia y la necesidad de fomentar y respaldar toda forma de lucha que tenga como objetivo la liberación de Palestina del río al mar.

Otra de las premisas fundamentales en base a la cual opera el Partido es el rechazo a cualquier solución que no pretenda descolonizar Palestina desde el Jordán al Mediterráneo, por lo que se posicionan rotundamente en contra de los Acuerdos de Oslo, ya que cerraron la posibilidad de  una confrontación y una resistencia palestina coordinada tanto dentro como fuera del territorio (Líbano, Jordania, Egipto, Siria…) al mismo tiempo que le abría la puerta al imperialismo sionista y estadounidense  para que la usara como su centro de operaciones militares y su experimento neoliberal en Oriente Próximo.

Sin embargo, y aunque el papel de la resistencia palestina ha transitado por tres estadios diferentes (encontrándose en este momento centrada en el territorio y, especialmente en Gaza), el partido Democrático Popular centra sus esfuerzos en generar las condiciones objetivas óptimas para consolidar una resistencia que derroque al sionismo de forma coordinada. Esto es, tanto con los palestinos dentro del territorio, como con la diáspora.

Esta debe apoyar la resistencia y conseguir que los partidos y la sociedad civil de los países donde viven se involucren activamente en la solidaridad y la lucha. También nos mencionaron como un punto fundamental la creación de una fuerza árabe internacional que rompa con los años de normalización con el sionismo y emprenda una guerra social y económica contra el imperialismo, cuya punta de lanza es el sionismo.

Por otra parte, el papel del Partido Democrático Popular fue fundamental durante la “guerra civil” libanesa en la protección de las clases populares y de la resistencia palestina. Históricamente han trabajado de forma coordinada con los palestinos dentro de Palestina, pero también con los palestinos en Líbano, así como con otras causas internacionalistas que buscan la democracia. Es por ello que forman parte de otros proyectos , como la campaña por la liberación de los presos cubanos en las cárceles estadounidenses o la campaña por la liberación de George Ibrahim Abdallah. De la misma manera que cumplen un rol en la formación de la Nueva Ruta Alternativa (Masar Badil) cuyo comité local en Líbano, piensan, debe estar liderado por la representación palestina.

Por último, hemos estado discutiendo sobre la situación de crisis política, social y económica que envuelve Líbano. Para nuestros camaradas, esta crisis no es un hecho esporádico ni tampoco accidental, sino que forma parte de una forma concreta de organización política. El sistema político libanés, heredero directo del colonialismo francés, está basado fundamentalmente en la especulación financiera y la destrucción del sistema productivo nacional y, si bien las fuerzas económicas neoliberales han arrastrado al país a la miseria, la izquierda libanesa más hegemónica no ha sabido dar una alternativa adecuada a la gente.

Esta crisis afecta especialmente a los palestinos que viven en los campos de refugiados de Líbano, quienes se encuentran asediados tanto por el ejército libanés, por las fuerzas reaccionarias libanesas, como también por las facciones palestinas, especialmente la Autoridad palestina. Por ello, es esencial que la verdadera izquierda revolucionaria libanesa sea capaz de crear una alternativa fuerte que evite que las fuerzas anteriormente mencionadas utilicen la situación de miseria traída por la crisis para hacer a la comunidad palestina dependiente de ellos.